Me da igual cómo lo hagas.
Me da igual si empiezas
con un susurro
o una mirada incitante,
con un rasguño en el alma
o con un mordisco en el vientre.
Me da igual si es
un beso en mi mirada
o una sonrisa en la frente.
Me da igual si muerdes,
quiebras o arrancas.
Si devoras o saboreas.
Me da igual si antes vas tú,
o nosotros. Qué sé yo.
Me da igual que no hables,
o que me piques,
o que me abraces,
o que me lastimes.
Que me da igual.
Sólo quiero que me hagas sentir.